ORDENACION (CACIQUE de UMBANDA o MORUBIXABA)

Este sacramento, implica el reconocimiento al esfuerzo y la capacidad del médium umbandista de haber pasado por diferentes etapas y largo tiempo de pruebas que lo califican como un “sacerdote umbandista”. Esta a su vez, es considerada la etapa final de pruebas y constituye en forma esencial la aprobación del mundo espiritual, hacia quien realizó los esfuerzos correspondientes para lograr tan alto honor. Pero que se entienda, esta distinción “Honor” se debe a que el mundo espiritual o también conocido como, Cofradía de Espíritus Ancestrales, han tomado debidas cuentas en otorgar las licencias espirituales, a quien fue confirmada como nuestro guía espiritual: la Entidad de cabeza. Pero, todo honor implica una RESPONSABILIDAD, consecuentemente una actitud a la altura de los acontecimientos. De modo que, quien ha arribado a este estadio de la evolución espiritual, tendrá que tener presente, además, que si se aparta mucho del camino tendrá a alguien que le advertirá que él, también es parte en el proceso de su evolución: la Entidad de cabeza. Si bien, cuando se recibe el “Cruzamiento”, el médium es consciente de los sacrificios y las responsabilidades que asume, es a partir del sacramento de la “ordenación” que según la experiencia adquirida se compromete a estructurar su vida en función de la Religión y todos los valores y responsabilidades que la misma trasmite y exige, en todos los ordenes de su vida. A su vez, es un compromiso social, pues se reconoce a partir de este momento como se ha mencionado anteriormente, la consagración de un “sacerdote umbandista”, el cual mediante los rituales distinguidos para ese fin, es presentado en forma pública y religiosa. Así pues, comienza a partir de este momento a ser un “Cacique de Umbanda”. ¿Cuáles son las obligaciones y responsabilidades de un Cacique de Umbanda? Como mencionáramos anteriormente, esta parecería ser la etapa final, en lo que hace a las experiencias y pruebas que un iniciado en Umbanda debe experimentar. Pero en realidad, comienza una nueva etapa en su vida religiosa. Ser un Cacique de Umbanda, significa ser implacable con la palabra. ¿Qué queremos decir con esto? Transmitir su energía correctamente, es decir, dirigirla en la dirección de la verdad, del amor y la justicia, que son los pilares filosóficos de nuestra Umbanda. En realidad, nos estamos refiriendo al poder de la palabra, que es: el Poder del Verbo. Pues sí, por medio de este poder que le fue encomendado, intentará por todos sus medios de llevar a la práctica todas las enseñanzas emanadas de los mensajes y doctrinas impartidas por las Entidades Espirituales, que son al fin, quienes transmiten el conocimiento y guían nuestra vida espiritual. Un Cacique de Umbanda es además, un representante de nuestra Religión que ha llegado a varios acuerdos, primero consigo mismo, segundo con su Entidad de Cabeza y tercero, con su Casa religiosa. Estos acuerdos significan, que jamás cejará en sus esfuerzos porque, la verdad, el amor y la justicia, sean semillas sembradas en las mentes de los que se inician en nuestra Umbanda y bandera de su propia vida. En el primer acuerdo, el iniciado asume para sí la idea filosófica, que es preciso mantener una inteligencia esclarecida por el estudio, una audacia sin límites en la búsqueda de la verdad, una voluntad inquebrantable y una discreción que no pueda corromperse o enervarse por nada. En el segundo acuerdo, tomará como regla espiritual y moral, los mensajes que su Entidad de Cabeza le recomiende. En este caso, y a la altura de su evolución el discípulo ha adquirido tal conocimiento de la técnica de comunicación de la Entidad de cabeza, que no tendrá mayores dificultades para descodificar los mensajes que esta le transmita. El tercer acuerdo versa sobre las responsabilidades que como Cacique ha adquirido dentro de su comunidad, templo o terreiro. Deberá acompañar al Jefe Espiritual en todos los que aceres religiosos, como ser: Trabajos Espirituales, Ceremonias y Rituales y permanente inquietud por develar los secretos que hasta ese momento le habían sido velado. Como hemos visto y acordado esta devoción o sacramento es públicamente conocida con el nombre de Cacique, que no en todas las comunidades indígenas suponía ser el jefe de la aldea, sino una jerarquía intermedia, ya que la jefatura la detentaba un anciano o en el mejor de los casos subordinado a un concejo de ancianos, como es el caso de quien en nuestra Umbanda arriba a esa responsabilidad. En cambio, MORUBIXABA es una palabra de origen Tupy y corresponde a Jefe de la Tribu, cosa que acontecerá con el iniciado que llegue hasta el siguiente y final paso que es la liberación. De manera que, a nuestro entender cabría mejor el nombre de MORUBIXABA para este paso iniciático.-